La limpieza proporciona información sobre el nivel de contaminantes que quedan en la superficie. Esta contaminación podría ser polvo, sales solubles como los cloruros, residuos de pintura vieja, aceite y grasa, óxido, corrosión, condensación y humedad, aminas, etc.
La contaminación superficial por ser causada de muchas maneras diferentes como pueden ser una limpieza insuficiente, residuos dejados después de lluvias (ácidas), sal marina en la superficie en ambientes marítimos, sales solubles introducidas por limpiezas de chorro contaminadas y muchos otros.
Por lo tanto, es importante verificar la limpieza de la superficie en el momento adecuado del proceso. Es necesario comprobar los niveles de limpieza después de la preparación de la superficie, pero tenga en cuenta durante el "tiempo de apertura" (que varía de horas a días) del acero nuevas contaminaciones se pueden introducir cuando el trabajo está insuficientemente protegido.